Narcís Oller nació en la ciudad de Valls (Tarragona), en 1846, en el seno de una familia liberal. Quedó pronto huérfano de padre y pasó a recibir de su tío y tutor una completa educación cultural y literaria. Por motivos de estudios y profesionales se trasladará a la ciudad de Barcelona donde vivirá hasta 1930, fecha de su muerte.
A Narcís Oller se le considera habitualmente el creador de la novela catalana moderna. Abogado de formación, fue procurador de tribunales, ejercicio que siempre compaginó con el de la literatura, como novelista, traductor y dramaturgo. Estas ocupaciones se relacionan y están imbricadas a partir de su poderosa capacidad para el análisis y el retrato psicológico y social. En efecto, Oller fue protagonista y testigo atento de una de sociedad en mutación a la que logró describir y analizar en sus novelas desde el apunte psicológico de los individuos que la componían.
Fue sin duda —y lo sigue siendo— un autor leído que supo concitar en su obra la popularidad entre el público sin abandonar la búsqueda de una voz particular y el uso de nuevas técnicas literarias con las que estaba experimentando el mainstream de la literatura europea. Oller será amigo de Pereda, Pérez Galdós, Verdaguer, Zola, con los que mantendrá contacto durante tiempo.